¿Bajar de peso en casa? ¿Es posible? ¡Ciertamente! No es necesario gastar dinero en costosos equipos de ejercicio, membresías en gimnasios ni tomar suplementos cuestionables.
Come lo más a menudo posible y reduce el tamaño de las raciones: estimula tu metabolismo, no pases hambre.
Beba al menos 1,5-2 litros de agua al día, en función de las necesidades individuales de su organismo.
Reduzca al mínimo el consumo de sal e intente evitar por completo el azúcar.
No compre alimentos precocinados, ya que a menudo están llenos de ingredientes nocivos y calóricos.
El error clave es la falta de comprensión de los principios de una nutrición adecuada para perder peso y la falta de motivación suficiente. Algunas personas que padecen obesidad tampoco son conscientes de la naturaleza psicológica de la adicción a la comida. Si no puede renunciar a los alimentos poco saludables, pero son claramente perjudiciales para su salud, busque asesoramiento con un psicoterapeuta.
Precisemos que estos productos pueden consumirse casi sin restricciones en ausencia de contraindicaciones individuales. Entre ellos se incluyen: